Nueva York implementa innovador sistema antiplagas: ¡Ratas al borde del hambre!
En Harlem, las autoridades han iniciado un innovador plan piloto que buscará transformar de manera radical el sistema de recolección de residuos. ¿Cómo crees que impactará esto en la comunidad local?
Tl;dr
- Nueva York impulsa una “revolución” contra las ratas.
- Se implementará un sistema de contenedores para recoger la basura.
- Los residentes tienen hasta 2026 para adaptarse a este sistema.
- Se nombró una “zarina antirratas” para combatir la plaga.
La “Revolución de la Basura” en Nueva York
Nueva York, la metrópoli que nunca duerme, ha decidido despertar y enfrentarse a un viejo adversario: las ratas. Casi un año después de nombrar a Kathy Corradi como “zarina antirratas”, la ciudad ha decidido emprender una “revolución” en su lucha contra estos roedores, que se han convertido en una verdadera plaga.
El nuevo plan de contenedores
Se planea dejar de lado la política de acumular montañas de bolsas negras de basura en las aceras, que se han convertido en un festín para las ratas. En su lugar, se introducirá un sistema de contenedores para limpiar las calles y matar de hambre al ejército de roedores. Desde marzo, más de 200.000 negocios de alimentos están obligados a depositar las más de 3.000 millones de toneladas de desechos que producen anualmente en estos contenedores.
Aunque los residentes tienen hasta 2026 para adaptarse a este sistema, ya se ha iniciado un programa piloto en Harlem, al norte de Manhattan. “Es un cambio”, comentó Ron James, un residente de Harlem. “Antes, cuando llegaba de noche, muchas veces tenía que caminar por la calzada para evitar las ratas que estaban en la acera. Ahora apenas las veo”, relató a la AFP.
Potenciales desafíos
A pesar de los beneficios evidentes, como la disminución de las multas por basura en la calle y la prevención de la destrucción de bolsas por recolectores, el plan de contenedores no está exento de desafíos. Los residentes han expresado su preocupación por la pérdida de espacio para sus vehículos debido a los 150.000 espacios de estacionamiento destinados a los contenedores en toda la ciudad. Además, la ciudad tiene que introducir camiones adaptados para levantar los contenedores y vaciarlos, ya que hasta ahora la recogida se hace manualmente, bolsa por bolsa.
Opinión editorial
Esta “revolución de la basura” es una respuesta necesaria a una situación insostenible. Aunque pueda presentar desafíos, es fundamental para proteger la salud y la calidad de vida de los residentes de la ciudad. Con el tiempo, esperamos que los neoyorquinos se adapten a este cambio, y que la ciudad se convierta en un ejemplo para otras metrópolis en la lucha contra las plagas urbanas.