Condenados por dejar a su hija de dos años sola con un perro que la atacó
Hace cinco años, una niña sufrió varias fracturas de cráneo y tuvo que ser sometida a una intervención quirúrgica cerebral para salvar su vida. Recientemente, finalmente se ha emitido la sentencia. ¿Qué dictaminó la corte?
Tl;dr
- Pareja abandona a hija con perro peligroso en 2018.
- El animal ataca a la niña, requiere cirugía cerebral.
- Los padres son condenados cinco años después.
- La casa estaba en condiciones deplorables, consumo de drogas.
Condena por abandono infantil
Un ex matrimonio ha sido sentenciado a prisión cinco años después de un incidente que dejó a su hija de dos años gravemente herida. La pequeña fue atacada brutalmente por el perro de la familia, un animal que ya había sido calificado como peligroso. El ataque fue tan severo que la niña requirió una cirugía cerebral para salvar su vida.
Detalles perturbadores
La tragedia ocurrió en Bradford, una ciudad de Yorkshire, Inglaterra. Según la BBC, la madre esperó ocho minutos antes de llamar a los servicios de emergencia. Cuando la policía llegó a la escena, encontraron la casa sucia y en desorden, con un fuerte olor a orina. Más tarde se descubrió que la pareja había consumido cocaína y anfetaminas antes del incidente.
Consecuencias del ataque
La niña sufrió múltiples fracturas de cráneo y hematomas cerebrales debido a las mordeduras del perro. Sin embargo, también se encontraron lesiones en otras partes del cuerpo que, según los médicos, era poco probable que hubieran sido causadas por el ataque del perro. El tribunal acusó a la pareja de negligencia y maltrato infantil.
La sentencia
La madre fue condenada a 18 meses de prisión mientras que el padrastro de la niña recibió una condena de un año. En sus conclusiones, el juez señaló que la niña podría haber muerto si no hubiera recibido atención médica inmediata. “Un castigo adecuado sólo puede lograrse mediante el encarcelamiento inmediato”, concluyó.
Opinión editorial
Este caso pone de manifiesto la importancia de la responsabilidad parental y la necesidad de sanciones ejemplares en casos de negligencia y abuso. La educación y la protección de los menores deben ser siempre una prioridad. Es imperativo actuar con firmeza para prevenir futuros incidentes.