UxP se enfoca en el Senado mientras los dialoguistas buscan limitar el futuro del DNU
El PJ-K está presionando para rechazarlo, inicialmente en la Cámara Alta y luego en la Cámara de Diputados. Mientras esperan la apertura de las sesiones ordinarias, los legisladores de otros bloques están preparando proyectos para limitar el uso futuro de los decretos y aumentar el control parlamentario. ¿Lograrán su objetivo?
Tl;dr
- El mega DNU de Javier Milei crea controversia y debate.
- La Unión por la Patria busca rechazar el decreto en el Senado.
- Varias iniciativas buscan modificar la ley que regula el DNU.
- El gobierno y la oposición debaten la validez de este mecanismo.
Mega Decreto de Necesidad y Urgencia: crítica y controversia
El Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) del presidente Javier Milei ha generado una oleada de críticas y debates, poniendo este mecanismo de gobierno bajo un riguroso escrutinio. La Unión por la Patria (UxP) está dispuesta a liderar la lucha contra el decreto, esperando que su rechazo en el Senado pueda generar una “onda expansiva” que facilite su rechazo en la Cámara Baja.
En ese sentido, la Bicameral de Trámite Legislativo se reunió recientemente para analizar la validez del DNU de desregulación económica 70/23 que Milei firmó el año pasado. Hubo denuncias de maniobras “dilatorias” y se decidió citar a los principales funcionarios del Ejecutivo para continuar la discusión la próxima semana.
La búsqueda de una regulación más estricta
Mientras tanto, varios sectores de la oposición están trabajando para impulsar proyectos que restrinjan el mecanismo del DNU. Bajo gobierno de Javier Milei, la senadora radical Carolina Losada fue la primera en presentar una iniciativa para modificar la ley 26122, que regula el trámite y los alcances de la intervención del Congreso respecto de decretos que dicta el Poder Ejecutivo.
Proyecto de modificaciones a la ley 26122
La propuesta de Losada, además de habilitar modificaciones y aprobaciones parciales para los DNU, establece límites más precisos de tiempo. En este sentido, los decretos perderían vigencia una vez cumplidos los plazos de tratamiento. Para ser considerados válidos, deberían contar con la aprobación de ambas cámaras, a diferencia de la actualidad, que solo requiere que una de ellas no lo rechace.
Además de Losada, otros bloques opositores como la Coalición Cívica y el Partido Socialista están trabajando en proyectos similares, buscando poner un fin a la vigencia indefinida de los DNU y establecer que el rechazo de una de las cámaras implique su derogación.
Opinión editorial
Se necesita un debate profundo y serio sobre el uso y abuso de los Decretos de Necesidad y Urgencia. Su utilización debe estar restringida a situaciones excepcionales, no como una vía alternativa para evitar el debate parlamentario. Es esencial que se respeten los procesos democráticos y se fomente la transparencia en la toma de decisiones. El uso de los DNU no debe ser un atajo para eludir la discusión y la rendición de cuentas que son fundamentales en cualquier democracia robusta.