Temporal devastador de lluvia, viento y granizo azota Córdoba en Año Nuevo
Entre la noche anterior y la madrugada de hoy, se presentaron tormentas en la capital provincial y en diferentes localidades del interior. Aunque no se han registrado víctimas, sí se han realizado evacuaciones y se han interrumpido algunos servicios. ¿Cómo se están recuperando estas áreas?
Tl;dr
- Temporal intenso en Córdoba causa daños pero no víctimas.
- Evacuados e interrupciones de servicios básicos reportados.
- Las localidades más afectadas: Alta Gracia y Anisacate.
- Servicios trabajan para restablecer la normalidad.
Temporal severo azota Córdoba
Córdoba, la capital provincial y algunas localidades del interior, sufrieron las consecuencias de un intenso temporal de lluvia, viento y granizo registrado entre anoche y la madrugada de hoy, según informa una fuente del Gobierno provincial. A pesar de los daños causados, no se reportaron víctimas.
Interrupciones en servicios y evacuaciones
El temporal ha provocado interrupciones en los servicios de electricidad y agua potable, y en algunos casos, la evacuación de residentes. Las localidades más afectadas, según el recuento oficial, fueron Alta Gracia y Anisacate, en el departamento San Martín del Valle de Paravachasca. El anegamiento de viviendas obligó a la evacuación preventiva de varias personas y la caída de árboles y postes de red de tendido eléctrico interrumpieron el servicio de electricidad.
Medidas para recuperar la normalidad
Las autoridades y servicios de emergencia están trabajando para recuperar la normalidad. En la ciudad de Córdoba, se ha puesto en marcha un operativo para restaurar la electricidad en varios barrios, afectados por la caída de postes de luz. También se interrumpió el servicio de agua potable debido a las crecidas de los ríos Anisacate y Segundo. Los bomberos y especialistas de las brigadas de Defensa Civil están trabajando en la zona para restablecer progresivamente los servicios.
Opinión editorial
Este evento climático adverso resalta la urgente necesidad de fortalecer nuestras infraestructuras y sistemas de respuesta a emergencias. La falta de víctimas es afortunada, pero no siempre podemos contar con esa suerte. Debemos aprender de cada evento y mejorar constantemente para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos.