Sudán: 13 niños mueren diariamente de hambre en una guerra civil ignorada
La situación humanitaria en la región de Darfur es alarmante, considerando únicamente las muertes registradas en un campo de refugiados. ¿Cómo podríamos mejorar la situación?
Tl;dr
- Sudán vive una guerra civil olvidada con una situación humanitaria dramática.
- Nueve millones de personas fueron desplazadas por el conflicto.
- La guerra estalló en 2023 tras un golpe de estado y el país está devastado.
- La situación humanitaria es crítica, con epidemias y desnutrición severa.
Un conflicto olvidado
La guerra civil en Sudán, un país olvidado en el este de África, apenas recibe cobertura mediática. Sin embargo, la situación humanitaria es dramática. Se estima que nueve millones de personas, de una población total de 45 millones, fueron desplazadas por el conflicto, con un millón y medio de sudaneses dispersos en diferentes campamentos en países vecinos.
La devastación de Sudán
La guerra estalló en abril de 2023, después de un golpe de estado que derrocó al dictador Omar al Bashir en 2019. La lucha por el poder desembocó en un conflicto que ha bañado el país de sangre. “La situación es tremenda. La violencia ha sido de unos niveles brutales. No se respetaron siquiera los centros de salud. Es dramático”, resumió Jairo González, representante de Médicos Sin Fronteras (MSF) en el este de África.
Una crisis humanitaria
El país sufre una crisis humanitaria de proporciones enormes. La comida y el agua potable son escasas, las cosechas se perdieron y las campañas de vacunación fueron abandonadas. Hoy, Sudán sufre una epidemia de malaria y un brote de sarampión. La ayuda humanitaria apenas llega y sólo a algunas zonas. Las cifras son alarmantes: la tasa de muertes en el centro de refugiados de Zamzam es de 2,5 por cada 10.000 personas al día, más del doble del umbral de emergencia.
Opinión editorial
Este conflicto olvidado en Sudán es un recordatorio cruel de cómo la indiferencia global puede perpetuar el sufrimiento humano. No podemos permitir que el foco de los medios se centre únicamente en conflictos de alto perfil mientras que otros, igualmente devastadores, permanecen en la sombra. Es nuestro deber como sociedad global garantizar que ninguna crisis humanitaria sea olvidada o ignorada.