Sobrevive a suicidio tras asesinar a su exnovia en salón de belleza: ahora enfrenta cadena perpetua
Teresita López, de 35 años, trabajaba de secretaria y tenía intención de denunciar a su agresor el día que la asesinaron en septiembre pasado. Sergio Patricio Galván, de 31 años, se recuperó tras un paso por terapia intensiva y ahora está en custodia. ¿Qué sucederá en el juicio?
Tl;dr
- Sergio Patricio Galván, acusado de femicidio de Teresita Luciana López.
- Galván, un policía, supuestamente se disparó a sí mismo después del asesinato.
- La víctima planeaba denunciar a Galván por acoso el día de su muerte.
- El caso está en investigación, con pruebas que apuntan a la violencia previa de Galván.
Una tragedia en Formosa
El crimen que sacudió a la ciudad de Formosa hace un mes y medio sigue resonando en los corazones de los argentinos. Sergio Patricio Galván, un policía de 31 años, es el principal sospechoso de la muerte de Teresita Luciana López, una joven de 35 años. Según las autoridades, Galván no intentó suicidarse después del asesinato, a pesar de las heridas autoinfligidas con un disparo en la mandíbula. “Las heridas no son en lugares vitales”, dijo el juez penal de instrucción Guillermo Caballero.
La secuencia de los hechos
Galván, quien se encuentra actualmente en un centro penitenciario, es acusado de “homicidio cuádruplemente agravado”. Este delito incluye la relación de expareja, la utilización de arma de fuego, el hecho de ser cometido por un funcionario público y la violencia de género. “No hay dudas sobre la autoría: fue él”, afirmó el abogado de la familia, Agustín Zucchet.
El día del asesinato, Galván irrumpió en el centro de belleza donde trabajaba Teresita y la ejecutó con un disparo en la cabeza. Se dice que Galván acosaba constantemente a Teresita, y ella planeaba denunciarlo el mismo día que fue asesinada.
Un final terrible
La frase que Galván dijo antes de asesinar a Teresita es escalofriante: “Sos mía o de nadie”. Estas fueron las últimas palabras que Teresita escuchó antes de ser asesinada. Tras el asesinato, Galván se disparó a sí mismo, pero sobrevivió y actualmente está detenido.
La investigación sigue en curso, pero las pruebas apuntan a una relación violenta entre Galván y Teresita con indicios de acoso y violencia previa al asesinato. La familia de Teresita confía en la Justicia y espera que se haga justicia.
Opinión editorial
Este caso es un sombrío recordatorio de la violencia de género que aún prevalece en nuestra sociedad. Es crucial que se haga justicia para Teresita y todas las víctimas de femicidio. Necesitamos tomar medidas serias y efectivas para prevenir estos crímenes atroces y proteger a las mujeres de los agresores.