Segundo saqueo en seis meses: los vecinos de Núñez temen lo peor
Los criminales accedieron a seis viviendas en dos pisos diferentes sin tener que forzar la puerta principal. Incluso lograron romper una puerta blindada sin que nadie se percatara. La sospecha entre los vecinos crece, planteando la posibilidad de que pueda tratarse de un inquilino temporal. ¿Quién podría ser el culpable?
Tl;dr
- Robo en edificio de Nuñez, sin signos de violencia ni ruido.
- Seis departamentos vacíos fueron desvalijados.
- Sospechas de complicidad interna y alquileres temporarios.
- La investigación continúa, pero no hay esperanzas de recuperar los objetos robados.
Robo silencioso y misterioso en Nuñez
En el tranquilo barrio de Nuñez, un hecho delictivo ha dejado a los vecinos desconcertados y asustados. En una tarde de domingo, seis departamentos de un mismo edificio fueron desvalijados. Lo más inquietante es que no se encontraron signos de violencia en las puertas ni se escuchó ningún ruido.
Desvalijamiento sin testigos
Los ladrones ingresaron al edificio ubicado en Ciudad de la Paz al 3400 entre las 14 y las 16 horas. Sin testigos ni cámaras de seguridad que los delaten, lograron abrir seis departamentos distintos, todos ellos desocupados. Incluso se atrevieron a derribar una puerta blindada en plena tarde.
A Agustín, una de las víctimas, le robaron los ahorros de toda su vida, además de su computadora de trabajo, equipo de música, relojes y otros objetos de valor. “Son profesionales y saben lo que hacen, pueden abrir cualquier puerta”, lamentó.
Sospechas internas y alquileres temporarios
Las sospechas de los vecinos apuntan a una posible “complicidad interna”. Los residentes del edificio sospechan que alguien pudo haber facilitado las llaves a los ladrones y proporcionado información sobre los movimientos en el edificio. Esta teoría se ve reforzada por el hecho de que todos los departamentos robados estaban vacíos en el momento del delito.
Otros vecinos sospechan que el problema podría provenir de un alquiler temporario o Airbnb en el edificio. No obstante, Agustín advierte que no hay certeza sobre estas sospechas y que no se debería culpar a nadie sin pruebas.
Investigación en curso
Agustín ha solicitado que se revisen más cámaras de seguridad en la zona para encontrar alguna pista que permita identificar a los delincuentes. No obstante, tiene pocas esperanzas de recuperar sus pertenencias. “Mis cosas ya las doy por perdidas. Ahora es arrancar de nuevo, en la medida en que pueda”, expresó resignado.
Opinión editorial
Este suceso nos recuerda que, incluso en los lugares que consideramos seguros, no estamos exentos de ser víctimas de la delincuencia. También pone de manifiesto la necesidad de establecer mejores medidas de seguridad en los edificios residenciales, como la instalación de cámaras de seguridad y la verificación de las identidades de los inquilinos temporarios. No podemos permitir que el temor se apodere de nuestros hogares.