Rusia amenaza con expulsión a inmigrantes ilegales si no combaten en Ucrania
Vladimir Putin está en la búsqueda de nuevos "voluntarios" para participar en la guerra, ejerciendo presión incluso sobre los extranjeros que se han nacionalizado. ¿Podrían estas tácticas aumentar la tensión internacional?
Tl;dr
- Putin busca nuevos “voluntarios” para la guerra de Ucrania, ahora entre inmigrantes ilegales.
- Las redadas en San Petersburgo resultaron en miles de arrestos de inmigrantes.
- Los inmigrantes son forzados a unirse al ejército ruso o enfrentan la expulsión.
- Al menos 1500 migrantes firmaron un contrato con el Ministerio de Defensa ruso.
La campaña de reclutamiento en Rusia
Vladimir Putin, el presidente ruso, amplía sus estrategias de reclutamiento para la guerra en Ucrania. Después de movilizar a jóvenes rusos y contratar un ejército de mercenarios, recurre ahora a una nueva fuente de “voluntarios”: los inmigrantes ilegales.
Redadas y arrestos
En las últimas semanas, la policía rusa realizó varias redadas en San Petersburgo, resultando en el arresto de miles de inmigrantes, en su mayoría provenientes de antiguas repúblicas soviéticas. Según informó el diario independiente ruso Novaya Gazeta Europa, se estima que miles de personas fueron detenidas durante estos operativos, incluyendo a familias enteras.
Un ultimátum para los inmigrantes
Los inmigrantes detenidos se enfrentan a un ultimátum: unirse al ejército ruso para luchar en Ucrania o ser expulsados junto a sus familias. Según Yury Borovskikh, presidente de la junta directiva de la ONG Rusia Detrás de las Rejas, “Putin necesita continuamente más soldados para continuar la guerra”.
Los funcionarios de las oficinas de alistamiento militar visitaron a los detenidos, “invitándolos” a unirse al ejército como “voluntarios”. A cambio, se les ofreció la ciudadanía rusa en un procedimiento exprés. Según Novaya Gazeta Europa, al menos 1500 migrantes firmaron un contrato con el Ministerio de Defensa ruso.
La “movilización parcial” y sus consecuencias
El reclutamiento de inmigrantes es una nueva táctica en un esfuerzo más amplio para mantener la lucha contra Ucrania. La llamada “movilización parcial” de Putin ha sido muy impopular en Rusia, y muchos ciudadanos han abandonado el país para evitarla. “O van a la guerra o son expulsados: no hay una tercera opción”, concluyó Borovskikh.
Opinión editorial
La desesperación de Putin para mantener su campaña en Ucrania destaca el alto costo humano de la guerra. Al forzar a los inmigrantes ilegales a pelear, el gobierno ruso está explotando a una población vulnerable que ya lucha por sobrevivir. Estas tácticas no solo son inhumanas, sino también contraproducentes, ya que pueden alimentar aún más el resentimiento y la resistencia contra el régimen.