Ricardo Darín y multitud de artistas protestan contra la Ley Ómnibus del Gobierno
A través de múltiples vídeos publicados en redes sociales, destacados actores, directores y productores de cine y teatro han solicitado que no se realicen recortes en la cultura. ¿Conseguirán evitar estos posibles recortes?
Tl;dr
- Artistas piden anular artículo 350 de la Ley Ómnibus.
- SAGAI gestiona derechos intelectuales de actores y bailarines.
- Artistas defienden que la industria cultural es superavitaria.
- Griselda Siciliani y Ricardo Darín piden respetar sus derechos.
La Ley Ómnibus y el mundo del arte
Un clamor resonante se ha elevado en el mundo artístico de Argentina. El blanco de las críticas es un particular artículo de la Ley Ómnibus impulsada por el presidente Javier Milei. Los artistas expresamente solicitan la anulación del artículo 350, que regula la propiedad intelectual y las sociedades de gestión colectiva de derechos.
Un llamado a la acción
Este reclamo no es aislado, es un coro compuesto por cientos de actores, directores y productores tanto del cine como del teatro. Entre ellos, nombres reconocidos como Ricardo Darín, su hijo, Chino Darín, Facundo Arana, Pilar Gamboa y Griselda Siciliani. Todos ellos han participado en una serie de videos difundidos por la Sociedad Argentina de Gestión de Actores Intérpretes (SAGAI), la entidad que administra los derechos intelectuales de estos profesionales.
Defensa de la industria cultural
Estos artistas no solo piden la anulación del artículo, sino que también defienden a su industria. “¿Por qué destruir algo que funciona bien?”, plantea Chino Darín. Facundo Arana añade: “Nuestra industria cultural es superavitaria”. La cultura es más que un simple pasatiempo, es un pilar de la economía y la identidad argentina, algo que estos artistas quieren proteger.
Un llamado a los derechos
Griselda Siciliani toma la palabra para exigir: “Señores legisladores, les pedimos que retiren del proyecto el artículo 350”. Ricardo Darín concluye con una frase poderosa: “No son privilegios, son derechos”. Este es un recordatorio de que los artistas no solo crean, sino que también tienen derechos que deben ser respetados.
Opinión editorial
En este conflicto cultural y legal, es vital recordar que los artistas no son solo los rostros en la pantalla o en el escenario. Son trabajadores, cuyos derechos de propiedad intelectual son esenciales para su sustento. La cultura no es un lujo, es una industria, una que merece protección y respeto.