Reveladas fotos de Catalina Gorostidi de ‘Gran Hermano’ en sus días como estudiante de Medicina
La doctora de 31 años, líder de la guardia pediátrica en el Hospital de Niños de Santa Fe, ha visto varias imágenes de sus primeros años en la medicina circulando. ¿Cómo ha evolucionado en su carrera desde entonces?
Tl;dr
- Catalina Gorostidi, participante polémica de Gran Hermano.
- Antes del programa, trabajó como médica pediátrica.
- Dejó su trabajo para entrar al reality show.
- Admite haber sido botinera y es hija de un exjugador de fútbol.
Catalina Gorostidi: Del hospital al reality show
Catalina Gorostidi, una de las participantes más polémicas de la nueva edición de Gran Hermano (Telefe), ha atraído la atención de los espectadores no solo por su personalidad, sino también por su historia de vida. Antes de ingresar a la casa más famosa del país, se desempeñaba como médica de pediatría.
Una carrera en la medicina
En sus redes sociales, Catalina reveló que trabajó en el Hospital Materno Infantil San Roque y en el Hospital Dr. Orlando Alassia. Durante la pandemia de coronavirus, trabajó intensamente, incluso exhortando a la población a quedarse en casa a través de postales compartidas en sus redes sociales.
El salto a Gran Hermano
No obstante, la hija de Adrián Gorostidi, exjugador de Colón de Santa Fe, dejó su puesto en el hospital para ingresar a Gran Hermano, alegando que viajaba a Italia. En su video de presentación al programa, Catalina no ocultó su entusiasmo por participar en el reality, calificándolo como su “sueño”.
“Nunca paso desapercibida, siempre llamo la atención. En toda mi infancia fuimos nómades por el trabajo de mi papá que era futbolista profesional. Vida nueva, escuela nueva, líder nueva”, expresó ella en el programa.
Una personalidad que atrae miradas
Además de su experiencia como médica y su conexión con el mundo del fútbol, Catalina ha generado controversia con sus fotos en bikinis coloridas y declaraciones sobre su vida amorosa. “Me encanta subir fotos hot, fui muy botinera. Básicamente fue como salir con el plantel de Talleres y Belgrano al mismo tiempo”, confesó en el reality.
Opinión editorial
El caso de Catalina Gorostidi es un ejemplo claro de cómo los límites entre la vida personal y la profesional pueden desvanecerse en el mundo del entretenimiento. Su transición de la medicina a un reality show demuestra que, a pesar de las críticas, hay quienes están dispuestos a renunciar a todo por cumplir sus sueños. Pero, ¿a qué costo? Esta es una pregunta que cada individuo debe responder por sí mismo.