Radicales cuestionan nominación de Ariel Lijo a la Corte Suprema
Cuatro miembros de la UCR han señalado que el candidato de Javier Milei ha cometido graves irregularidades durante su mandato como juez federal, algunas de las cuales podrían constituir delitos penales. ¿Qué consecuencias enfrentará por estas acciones?
Tl;dr
- Cuatro diputados de la UCR impugnan la candidatura del juez Ariel Lijo.
- Acusan a Lijo de cometer irregularidades graves en su cargo.
- Los legisladores citan varios casos problemáticos en su carrera.
- El Colegio de Abogados también se opone a su nominación.
Impugnación a la candidatura del juez Lijo
El miércoles pasado, cuatro diputados de la Unión Cívica Radical (UCR) impugnaron la candidatura del juez federal Ariel Lijo para ocupar el quinto puesto de la Corte Suprema de Justicia, que quedó vacante tras la salida de Elena Highton de Nolasco en 2021. Los legisladores Fernando Carbajal (Formosa), Pedro Galimberti (Entre Ríos), Manuel Aguirre (Corrientes) y Marcela Coli (La Pampa) alegan que Lijo ha cometido “severas irregularidades” en su cargo, algunas de las cuales podrían ser consideradas delitos penales.
Acusaciones detalladas
Los diputados radicales sostienen que hay varios hechos en la carrera de Lijo que hacen inadmisible su candidatura. Destacan, por ejemplo, la denuncia de Elisa Carrió en 2018, quien acusó a Lijo de formar parte de una asociación ilícita y de lavado de dinero. Según los legisladores, “pese a la gravedad de las circunstancias denunciadas, ninguno de los imputados fue indagado”.
Además, cuestionan la actuación de Lijo en varios casos de alto perfil, entre ellos el expediente de YPF y una investigación sobre sobornos supuestamente pagados por Siemens a exfuncionarios del gobierno de Carlos Menem. En ambos casos, afirman que Lijo “dilató la causa” y omitió pruebas clave.
Oposición adicional
No solo los legisladores de la UCR han expresado su oposición a la candidatura de Lijo. El Colegio de Abogados de la Ciudad de Buenos Aires también ha presentado su impugnación, señalando que Lijo “carece de las calidades excepcionales que se esperan de alguien que aspire al cargo” y recordando que ha sido objeto de cinco pedidos de juicio político entre 2023 y 2024.
Opinión editorial
Los graves señalamientos contra el juez Ariel Lijo nos recuerdan que la justicia no puede ser ciega ante sus propias faltas. Se debe preservar la integridad de la Corte Suprema y mantener la confianza del público en nuestras instituciones. El nombramiento de jueces con antecedentes cuestionables socava estos principios fundamentales.