Prepagas y Gobierno chocan por reglamentación de decreto de Milei: alertan sobre más aumentos
La desregulación suprimió los límites de las cuotas y modificó las contribuciones que las empresas de medicina prepaga deben realizar a un fondo compensador para tratamientos costosos. Anticiparon que las cuotas deberán aumentar para cumplir con la normativa. ¿Cómo afectará esto a los usuarios?
Tl;dr
- Reglamentación de servicios de salud permite elección libre de medicina privada.
- Las prepagas deben aportar un 20% de las cuotas al Fondo Solidario de Redistribución (FSR).
- El sector advierte un posible aumento en las cuotas y cuestiona el funcionamiento del FSR.
- El Gobierno responde que el FSR no se financia con impuestos y su volumen puede llegar a crecer entre $10.000 y $20.000 millones.
Reglamentación de servicios de salud
El Gobierno ha publicado recientemente la reglamentación de los servicios de salud, después de la desregulación establecida por el DNU 70/23 firmado por Javier Milei. A partir de marzo, los ciudadanos tendrán la libertad de elegir cómo asignar sus aportes al sistema de medicina privada.
El Fondo Solidario de Redistribución
Esta reglamentación impone a las prepagas a contribuir con un 20% de las cuotas que perciben al Fondo Solidario de Redistribución (FSR). Este fondo tiene como objetivo financiar el sistema solidario de salud, cubriendo costos de prestaciones por discapacidad, tratamientos de alto costo y enfermedades poco frecuentes.
El impacto en las cuotas de las prepagas
El sector ha expresado su preocupación ante esta medida, advirtiendo que podría provocar un aumento en las cuotas. Critican además el funcionamiento del FSR, argumentando que el 90% de los fondos se destinan a prestaciones de discapacidad, dejando sin cobertura a los tratamientos de alto costo. Para el dueño de Swiss Medical y presidente de la Unión Argentina de Salud, Claudio Belocopitt, este aporte adicional puede traducirse en un aumento del 20% en las cuotas y podría considerarse como un nuevo impuesto sobre el sector de medicina privada.
La respuesta del Gobierno
En respuesta a estas quejas, la Superintendencia de Servicios de Salud (SSN), que administra el FSR, ha aclarado que este no es un fondo fiduciario ni se financia con impuestos. Según la SSN, este mayor aporte al FSR no debería implicar un aumento directo en las cuotas de las prepagas, ya que el dinero se mantendrá dentro del sistema. Estiman que el volumen del Fondo puede llegar a crecer entre $10.000 y $20.000 millones.
Opinión editorial
Esta nueva regulación abre un importante debate sobre el equilibrio entre la libertad de elección en salud y la solidaridad social. Es esencial que se realice un seguimiento estricto del FSR para garantizar su correcto funcionamiento y evitar posibles aumentos en las cuotas. La salud es un derecho fundamental y cualquier cambio en su gestión debe ser realizado con responsabilidad y transparencia.