Pity Álvarez regresa a las redes con cuatro temas para documental de tangos
Daniel Melingo compartió información acerca del rol del líder de Intoxicados en el proyecto "Tangos bajos (The movie)". ¿Qué podríamos esperar de esta colaboración intrigante?
Tl;dr
- Pity Alvarez vuelve a hacer música con Julieta Laso.
- Grabó 4 canciones para el documental TANGOS BAJOS.
- Se viralizó una foto de Alvarez reparando una casa.
- El caso de homicidio de Alvarez está en pausa, pendiente de evaluaciones de salud.
El retorno musical de Pity Álvarez
El líder de Viejas Locas e Intoxicados, Pity Álvarez, ha vuelto a la música. En una fotografía publicada recientemente, Álvarez aparece junto a la conocida cantante Julieta Laso. La exintegrante de la Orquesta Fernández Fierro y autora de varios discos aclamados, expresó su agradecimiento a Álvarez, marcando el día como «histórico».
Collaboración en el documental TANGOS BAJOS
Daniel Melingo, otro renombrado músico y ex integrante de Los Twist, reveló en los comentarios de la publicación que Álvarez había grabado cuatro canciones para el documental TANGOS BAJOS. El disco original de Tangos Bajos, publicado por Melingo en 1998, incluye temas conocidos como “Ayer”, “Angurrienta”, “Laberinto”, “Narigón” y “El escape”.
Álvarez en la vida cotidiana
Recientemente se viralizó una imagen de Álvarez reparando una casa en Villa Ballester. La foto fue publicada en TikTok por una amiga del cantante, quien destacó la humildad de Álvarez, incluso en sus acciones más cotidianas, como la reparación de un timbre.
Situación legal de Álvarez
Álvarez fue acusado de homicidio en 2018, pero su caso fue suspendido después de que el juez determinó que no estaba en condiciones de enfrentar un juicio. La familia y el abogado de Álvarez han aclarado que el cantante no está prófugo, sino que ha sido trasladado a una nueva clínica para continuar su rehabilitación.
Opinión editorial
La vuelta de Pity Álvarez a la música es un potente recordatorio de la capacidad de superación y la tenacidad. A pesar de sus desafíos personales y judiciales, Álvarez no solo continúa con su rehabilitación, sino que también vuelve a su pasión: la música. Su historia es un testimonio de resiliencia que nos recuerda que el arte puede ser un refugio y una fuente de renovación.