Perpetua para el asesino de su hijastro de dos años: ‘Incomprensible su acción mientras dormía’
Marcelo Fernández (26), responsable del pequeño Valentino Troncoso, fue sentenciado a la pena máxima este martes por su asesinato en una vivienda de Grand Bourg en noviembre de 2021, pocos días antes de la muerte de Lucio Dupuy. ¿Quién protegerá a los más vulnerables?
Tl;dr
- Marcelo Javier Fernández condenado a prisión perpetua por asesinato.
- Asesinato de Valentino Troncoso, de 2 años, en Grand Bourg.
- Fernández mintió inicialmente sobre las circunstancias de la muerte.
- La madre de la víctima, Sara Troncoso, fue desvinculada del caso.
Justicia para Valentino
El peso de la ley ha caído sobre Marcelo Javier Fernández, de 26 años, quien ha sido condenado a prisión perpetua después de dos largos años y cuatro meses de litigio. La causa del castigo fue el atroz asesinato a golpes de Valentino Troncoso, un niño de apenas dos años, mientras dormía en Grand Bourg.
La lucha de una madre
“El dolor va a ser eterno y nada podrá aliviarlo, pero al menos el asesino va a pagar”, fueron las palabras de la madre del menor, Sara Troncoso, minutos después de conocer la sentencia. Sara ha estado presente durante las cinco audiencias, describiendo la experiencia como “días muy duros”. A pesar de su dolor, mantuvo la esperanza de que se hiciera justicia por su hijo.
El engaño de un asesino
Fernández intentó, desde el inicio de la investigación, evadir la ley con mentiras. Al llegar al hospital con el niño agonizante, afirmó que se había ahogado con su biberón. Sin embargo, la autopsia reveló una versión muy diferente, mostrando signos de estrangulamiento y múltiples heridas en todo su cuerpo.
Sara Troncoso, que también fue inicialmente detenida, fue desvinculada del caso al comprobarse que estaba trabajando en el momento del crimen y que las lesiones de Valentino eran recientes. Fue un alivio para ella, aunque el dolor de perder a su hijo de manera tan brutal persistirá.
Opinión editorial
Este caso nos recuerda el deber que tenemos como sociedad de proteger a los más vulnerables. La justicia puede ser lenta, pero finalmente llega. Sin embargo, debemos trabajar para prevenir estos terribles incidentes en primer lugar. La educación y la concienciación son clave.