Niño muere por hemorragia horas después de caer por las escaleras del colegio
El trágico incidente ocurrió en la Escuela N°15 de Samoré, ubicada en el barrio Villa Lugano de Buenos Aires. Los padres y familiares de la víctima claman por justicia. ¿Se hará justicia en este caso?
Tl;dr
- Muere Juancito Ticona, de 6 años, tras caerse en su escuela.
- La familia denuncia negligencia de la escuela y del hospital.
- El barrio Samoré exige justicia para el pequeño Juancito.
- Los padres y vecinos organizan una marcha para pedir justicia.
La tragedia que golpea a Villa Lugano
En el barrio Samoré, ubicado en Villa Lugano, una triste noticia ha causado consternación: Juancito Ticona, un niño de 6 años, falleció tras sufrir una caída en su escuela. La tragedia se agravó debido a una serie de circunstancias que, según la familia del pequeño, podrían haberse evitado.
Un día de escuela que termina en desastre
Juancito asistía al primer grado en la Escuela República Argentina N°15. El fatídico día, Juancito se tropezó y cayó por las escaleras del establecimiento durante el recreo. En lugar de solicitar una ambulancia inmediatamente, los directivos de la escuela simplemente aplicaron hielo en la zona afectada y pidieron a los padres que lo retiraran.
De la ignorancia a la tragedia
A pesar de que el niño se sentía mal, los médicos del hospital local restaron importancia a su estado y lo devolvieron a casa. “No tiene nada grave”, afirmaron. Pero las horas siguientes revelaron una realidad devastadora: Juancito sufría una hemorragia interna causada por un hematoma en el riñón. Ese mismo día, Juancito perdió la vida, sumiendo a su familia y a la comunidad en un profundo dolor.
Una comunidad en búsqueda de justicia
La noticia de la muerte de Juancito desató una ola de indignación en el barrio Samoré. Los vecinos y los padres de los compañeros de Juancito organizaron una marcha para exigir justicia. Cuestionan la negligencia de la escuela y del hospital y aseguran que la muerte del niño pudo haberse evitado con las medidas adecuadas.
Opinión editorial
La muerte de Juancito es una tragedia que nos golpea a todos y nos recuerda la importancia de la responsabilidad y la prudencia, en particular en instituciones educativas y sanitarias. Su pérdida nos desgarra, pero también nos llama a la acción: a luchar por la justicia y a trabajar para que ningún otro niño sufra una tragedia similar. Que su inocente sonrisa sea un recordatorio de lo que está en juego.