Maduro cancela operaciones de la oficina de la ONU de derechos humanos en Venezuela
El líder mandó a retirar al personal de un organismo instalado en 2019, acusándolo de tener una actitud colonialista, abusiva y contraria a la Carta de las Naciones Unidas. ¿Cómo responderá la comunidad internacional ante estas acusaciones?
Tl;dr
- Venezuela suspende las actividades de la Oficina del Alto Comisionado de ONU.
- El gobierno ordena la salida del personal en 72 horas.
- Canciller venezolano critica la postura parcial de la institución.
- La decisión ocurre tras problemas con el relator especial de la ONU.
Actividades de la ONU suspendidas en Venezuela
El gobierno de Venezuela ha tomado una decisión contundente. Este jueves, anunció la suspensión de las actividades de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos en el país. Además, ordenó la salida de su personal en un plazo de 72 horas.
Acusaciones contra la Oficina de la ONU
El canciller venezolano, Yvan Gil, ha criticado fuertemente a la institución. Según él, lejos de ser un organismo imparcial, se ha convertido en el “bufete particular del grupo de golpistas y terroristas que permanentemente se confabulan contra el país”. Esta suspensión durará hasta que la oficina rectifique públicamente su actitud, según Gil.
Expulsión de funcionarios y revisión de cooperación
Además de la suspensión de sus actividades, el gobierno de Nicolás Maduro señaló que realizará una revisión integral de los términos de cooperación con esta organización en los próximos 30 días. En una medida adicional, se ha ordenado la expulsión de 13 funcionarios de la oficina que operan en Caracas.
La decisión se produce un día después de que el relator especial de la ONU sobre el derecho a la alimentación, Michael Fakhri, asegurara que el gobierno venezolano le impidió visitar centros de detención y que las autoridades alteraron constantemente su agenda durante su visita de dos semanas al país.
Opinión editorial
Esta decisión del gobierno venezolano ciertamente afectará la dinámica de los derechos humanos en el país. Sin embargo, es vital que todas las partes involucradas mantengan un diálogo abierto y respetuoso, buscando siempre la imparcialidad y la objetividad para garantizar la protección de los derechos humanos en Venezuela.