Luchando por los derechos de su nieto discapacitado contra la obra social
Cecilia reside en Ensenada, teniendo la responsabilidad de cuidar a Ian. Ha acudido a la justicia en tres ocasiones, afirmando que su vida transcurre "de amparo en amparo". ¿Cómo se resolverá su situación legal?
Tl;dr
- Cecilia Miralles lucha por la atención médica de su nieto discapacitado.
- Ha llevado a la justicia a la obra social estatal IOMA tres veces.
- Los procedimientos burocráticos paralizan la entrega de suministros esenciales.
- El IOMA, con dos millones de afiliados, está en emergencia.
La batalla de una abuela por su nieto
Cecilia Miralles, residente de Ensenada, está al frente de una lucha diaria. Su desafío no es solo cuidar a su nieto de 11 años, Ian, quien quedó con discapacidades múltiples después de un accidente doméstico, sino también luchar contra un sistema burocrático que no le ofrece el apoyo necesario.
Enfrentando a la obra social estatal
El Instituto Obra Médico Asistencial (IOMA), la obra social estatal de la provincia de Buenos Aires, ha dejado a Cecilia en la necesidad de buscar justicia legal en tres ocasiones. Su lucha ha sido para obtener los pañales que Ian necesita, la internación domiciliaria requerida y hasta una silla de ruedas. “Vivo de amparo en amparo”, reveló en una entrevista con Telenoche.
La solicitud de la silla de ruedas lleva más de un año estancada en el área de Compras de la obra social. A pesar de contar con una sentencia a favor para los pañales, Cecilia tiene que batallar para hacer efectiva la entrega en la cantidad, frecuencia y características necesarias. Su recorrido la lleva de oficina en oficina, de farmacia en farmacia y de amparo en amparo en la justicia en lo contencioso administrativo del departamento judicial La Plata, acompañada por su abogado Nicolás Graschinsky.
La crisis del IOMA
La historia de Cecilia no es única. El IOMA, obra social con más de dos millones de afiliados, se encuentra en una situación de emergencia. Profesionales de la salud se niegan a atender por IOMA en todos los municipios bonaerenses. Las cirugías se suspenden, las prestaciones se cortan, las farmacias no entregan medicamentos, pañales y otros insumos. Los que pueden, recurren a la justicia. Casi todos se unen en grupos solidarios para compartir donaciones de medicamentos y prótesis.
Opinión editorial
La situación de Cecilia e Ian es un llamado a la acción. Es imprescindible que las autoridades correspondientes tomen medidas para mejorar los servicios de atención médica, especialmente para aquellos en situaciones vulnerables. Todos merecen recibir la atención médica adecuada sin tener que luchar constantemente contra un sistema burocrático.