Los dramáticos últimos minutos del policía que se suicidó tras la pérdida de Boca
Un joven policía de 23 años acabó con su vida en su hogar en Claypole, después de la final de la Copa Libertadores en la que Boca perdió contra Fluminense. ¿Qué llevó a este trágico desenlace?
Tl;dr
- Marcelo Alejandro Morales se suicidó tras la derrota de Boca.
- El suceso ocurrió en su casa en Claypole, Buenos Aires.
- Estaba deprimido y era muy fanático de Boca, según su madre.
- El Centro de Atención al Suicida proporciona ayuda gratuita y anónima.
La pasión y la tragedia: el caso de Marcelo Alejandro Morales
Un hecho lamentable ha estremecido a la localidad de Claypole, en el sur del conurbano bonaerense. Marcelo Alejandro Morales, un policía y ferviente seguidor del Boca Juniors, se quitó la vida en su habitación después de la derrota de su equipo en la final de la Copa Libertadores ante Fluminense.
Detrás de la tragedia: el testimonio de una madre
La trágica noticia fue revelada por la madre del policía, quien compartió los últimos momentos de su hijo. Según ella, Morales estaba profundamente afectado por la derrota de su equipo. “Si perdía estaba mal, deprimido y triste. Decía que Boca no podía perder. Yo le decía que tenga fe, que íbamos a ganar”, relató la madre.
El desenlace fatal
El fervor por el fútbol, en este caso, desembocó en una tragedia inesperada. Morales, sumido en su tristeza, se dirigió a su habitación y se disparó con su arma reglamentaria. La madre de Morales, aún conmocionada, recordó: “No amenazó con hacer nada, ni tampoco dio indicios”.
Apoyo en momentos de crisis: Centro de Atención al Suicida
Este lamentable suceso nos recuerda la importancia de ofrecer apoyo en momentos de crisis. El Centro de Atención al Suicida (CAS) es una organización no gubernamental que brinda ayuda de forma anónima, gratuita y voluntaria a personas en situaciones de crisis y a sus allegados. Puede comunicarse a la línea 135 si se encuentra en CABA o Gran Buenos Aires, y al (011) 5275-1135 o el 0800 345 1435 desde cualquier parte del país.
Opinión editorial
La pasión por el fútbol no debería conducir al abismo. El caso de Marcelo Alejandro Morales nos recuerda que debemos mantener una perspectiva saludable de nuestras aficiones y buscar ayuda cuando la tristeza nos abruma. No estamos solos, hay ayuda disponible.