Lila, la perra de Villa Crespo que cautiva desde su departamento
Todos los arrendatarios comparten los costos de su comida y se alternan en las responsabilidades de atenderla, llevarla al médico veterinario y pasearla. ¿Te gustaría unirte a esta labor de cuidado compartido?
Tl;dr
- Lila, una perra de 12 años, es la encargada de un edificio en Villa Crespo.
- La usuaria @yclari hizo famosa a Lila en las redes sociales.
- Todos los inquilinos cuidan de Lila y contribuyen a sus gastos.
- La publicación de @yclari fue nombrada “tuit del mes”.
La singular historia de Lila, la perra ‘encargada’ de un edificio
En un particular edificio de Villa Crespo, los inquilinos son recibidos no por un portero humano, sino por una encargada de cuatro patas. Su nombre es Lila, una perra de 12 años que ha convertido este lugar en su hogar y que ahora, gracias a las redes sociales, se ha vuelto famosa.
Una fama inesperada
La responsable de esta repentina notoriedad es la usuaria @yclari, quien se entusiasmó con Lila y decidió compartir su historia en su cuenta de X. En la publicación, @yclari relató cómo “El edificio la tiene. O sea, en las expensas vienen sus gastos y vive en la escalera y tiene muchos dueños que la cuidan y pasean”. La publicación rápidamente superó los 100 mil “me gusta”, llenándose de comentarios que solicitaban una foto de Lila.
El día a día de Lila
Según uno de los dueños de Lila, el usuario @andresmarks, la perra “tiene tres camas en los descansos de la escalera, pero duerme donde le place”. Además, Lila tiene acceso libre al jardín del edificio y, en ocasiones, elige quedarse con algún inquilino. Lila es una perra amigable y tranquila que se lleva bien con todos, especialmente con los niños.
Los residentes del edificio comparten las responsabilidades de cuidar a Lila y mantener su espacio limpio. “Ella es feliz, nosotros también”, concluyó @andresmarks en su tuit, dejando en claro que la presencia de Lila enriquece la vida de todos los inquilinos.
Opinión editorial
La historia de Lila es un maravilloso recordatorio de la capacidad de los animales para unir a las comunidades humanas. En un mundo que a menudo parece dividido, la presencia de Lila en este edificio es un rayo de luz, demostrando que la empatía y el cuidado mutuo pueden superar cualquier barrera. Su historia nos enseña que todos tenemos un papel que desempeñar en la creación de comunidades más fuertes y más unidas.