Kicillof desvela estrategia contra Milei y busca más respaldo gubernamental tras recorte de fondos
En Buenos Aires, aseguran que la decisión del gobierno nacional representa un ataque a los bonaerenses, al no haber recibido recursos en diciembre y enero. Afirman que están dispuestos a hacer lo que sea para triunfar sobre la Nación. ¿Podrán lograrlo?
Tl;dr
El desafío de Kicillof a Milei
El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, no se muerde la lengua al hablar del presidente Milei. En una reciente conferencia de prensa, afirmó sin rodeos que Milei no está afectando a los gobernadores, sino a los docentes. “Le está sacando la plata de los bolsillos a los docentes”, señaló.
Una estrategia para el pueblo
La estrategia del mandatario peronista es mostrar que el presidente va contra “el pueblo” y no contra un dirigente o partido político en particular. Kicillof y su equipo consideran que la actitud de Milei es un atropello a todos los bonaerenses. Además, el gobernador busca el respaldo de otros mandatarios, incluso de distinto signo político, para enfrentar a Milei.
La unión de los gobernadores
Kicillof subrayó que ha recibido el apoyo de todas las fuerzas políticas de la provincia y todos los gobernadores. Hizo hincapié en la gravedad de la situación y en la necesidad de hacer una defensa en bloque. “No se pueden meter con las provincias”, enfatizó.
Medidas legales en curso
Sin embargo, las palabras no son suficientes. Kicillof ha decidido tomar medidas legales y presentará en los próximos días una demanda contra el Estado nacional ante la Corte Suprema de Justicia de la Nación. El objetivo es mantener el Fondo de Fortalecimiento Fiscal (FOFOFI) y suspender los efectos del decreto 192/24 mientras la Corte Suprema analiza el caso.
Opinión editorial
Este escenario pone de manifiesto una vez más las tensiones y desafíos inherentes a nuestra democracia. La lucha de Kicillof y otros gobernadores contra las políticas de Milei es un claro reflejo de esto. Es esencial que recordemos que la política debe ser siempre un medio para mejorar la vida de los ciudadanos y no una arena para la lucha de poder. La educación, en particular, no debe ser nunca una moneda de cambio.