Junior Benítez solicita uso de celular en prisión tras ser confiscado por amenazas a su ex familia
El exjugador de fútbol, condenado a cinco años de cárcel, ha estado publicando en Instagram desde una prisión de La Plata. Actualmente, se le acusa de "incitación al suicidio" en el caso de Anabelia Ayala. ¿Qué sucederá a continuación?
Tl;dr
- Junior Benítez, exfutbolista condenado, solicita un móvil en prisión.
- La petición es rechazada por incumplimiento de las normas internas.
- Benítez fue imputado por “instigación al suicidio” tras la muerte de su expareja.
- El padre de la víctima lamenta la falta de progreso en la causa judicial.
Una petición polémica
Junior Benítez, antiguo jugador de Boca Juniors y Lanús, solicitó la reintegración de su teléfono móvil o la entrada de uno nuevo en la cárcel. Benítez, condenado a cinco años de prisión por amenazas a la familia de su expareja Anabelia Ayala, realizó la petición a través de su abogada defensora, María Inés Salomone.
Negativa a la solicitud
La respuesta del juez al pedido fue negativa. Según Rodrigo Tripolone, abogado de la familia Ayala, se le negó el uso de un teléfono por incumplimiento de las normas internas del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB). Anteriormente, Benítez había utilizado su teléfono para realizar publicaciones amenazantes en Instagram.
Acusaciones graves
Después de su condena, Benítez fue acusado de “instigación al suicidio” en relación con la muerte de Anabelia. A pesar de los indicios, la causa no avanza, generando malestar en la familia de la víctima. El letrado Tripolone asegura que el fiscal Juan Manuel Baloira se negó a registrar en las declaraciones de los testigos datos claves para avanzar en la causa.
La lucha continúa
Por su parte, Juan Carlos Ayala, padre de la joven, expresó su pesar por el avance de la causa. “Lo triste, más allá de que sea mi hija, es que hay una muerte y no veo preocupación por parte de la Justicia”, declaró a este medio.
Opinión editorial
El caso de Junior Benítez ilustra el desafío constante que supone la lucha contra la violencia de género. La lentitud y la aparente falta de interés por parte de la justicia agravan el dolor de las familias afectadas. Es imperativo que se tomen medidas firmes y rápidas en casos de este tipo, no solo para castigar a los culpables, sino también para proteger a las víctimas y prevenir futuros abusos.