IPC privado: baja en febrero, pero con una desaceleración más lenta de lo estimado por el Gobierno
Aunque los números de enero disminuyeron, los del segundo mes del año seguirán siendo altos. Los expertos sugieren que podríamos tener un IPC mensual de un solo dígito después de la segunda mitad de 2024. ¿Cómo impactará esto en nuestra economía?
Tl;dr
- El Gobierno prevé una desaceleración de la inflación en los próximos meses.
- Factores como los aumentos en combustibles y costos educativos presionarán la inflación.
- La inflación de febrero podría ser menor al 15%, pero aún muy alta.
- La corrección de precios y la caída en los salarios reales podrían limitar la inflación.
¿Qué esperar de la inflación en los próximos meses?
Ante la revelación de la tasa de inflación de enero, el Gobierno anticipa una ralentización de los precios en los meses venideros. Según el último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) del Banco Central, los analistas proyectan una inflación del 18% en febrero, 15,3% en marzo y 13% en abril.
Factores que impactarán la inflación
A pesar de la disminución prevista, los números seguirán siendo altos. “En Eco Go, prevemos una desaceleración de la inflación más lenta de lo que el Gobierno espera”, afirma Lucio Garay Méndez, economista de la consultora. Entre los factores que presionarán la inflación en marzo, mencionó los aumentos en combustibles, transporte, energía y costos educativos.
El panorama inflacionario
Nicolás Alonzo, economista del estudio OJF, prevé que febrero será un mes “caliente”, aunque posiblemente con una inflación inferior a la de enero. Alonzo anticipó que el primer trimestre podría finalizar con una inflación interanual significativamente superior al 300%.
Las tarifas energéticas y la incertidumbre en torno a la política cambiaria son factores clave en el escenario inflacionario. Alonzo señaló la “volatilidad alta que afecta a la economía argentina” y los precios de servicios rezagados que aún deben ajustarse.
Proyecciones y opiniones de expertos
En medio de una fuerte caída en el consumo, Garay Méndez afirmó que la corrección en la distorsión de precios presionará la inflación, pero la caída en los salarios reales y la licuación de los pesos podrían limitarla. Opinó que la inflación podría llegar a un dígito hacia mitad de año si se sigue de cerca la cosecha y la oferta de dólares.
Opinión editorial
A pesar de las previsiones del Gobierno, la inflación sigue siendo un desafío crucial para la economía argentina. El equilibrio entre corregir las distorsiones de precios y proteger a los trabajadores es un acto delicado. Es fundamental mantener un enfoque vigilante y adaptativo para navegar de manera efectiva por el volátil paisaje económico.