Ingeniero espacial salteño en Buenos Aires: Mi meta es construir satélites
Como el primer universitario de su familia, Matías Escobar ha logrado convertirse en el tercer ingeniero espacial del país y el pionero en su provincia. ¿Podrías imaginar qué retos tuvo que superar para llegar hasta aquí?
Tl;dr
- Matías Escobar, el tercer argentino graduado en ingeniería espacial.
- Espera devolver a Argentina a través de la construcción de satélites.
- Descubrió su pasión por la física en la secundaria.
- Trabajó y estudió simultáneamente en la UNSAM.
El tercer ingeniero espacial argentino
Hoy, el mundo celebra a Matías Escobar, un joven de 29 años originario de Salta. Recientemente, se convirtió en el tercer argentino en graduarse de ingeniería espacial en la Universidad Nacional de San Martín (UNSAM), destacándose como el primer salteño en hacerlo.
Un camino de esfuerzo y dedicación
Criado en una familia de clase media, Matías siempre tuvo un espíritu luchador. A pesar de las dificultades económicas, su educación pública en la Escuela Augusto Raúl Cortázar y la Escuela Victorino de la Plaza, ambas en Salta, fue fundamental en su formación. Durante su infancia, su tiempo se dividía entre el fútbol con sus amigos y ayudar a su madre con su negocio de ropa.
Aunque inicialmente mostró interés por la abogacía y la contabilidad, su pasión por la física se despertó durante sus últimos años de secundaria. “Entender cómo funcionaban las cosas me volvió loco”, recuerda. Este interés lo llevó a estudiar física en la Universidad Nacional de Salta (UNSA). Sin embargo, pronto se dio cuenta de que anhelaba algo más práctico, algo que conjugara la ciencia con la tecnología.
Descubriendo la ingeniería espacial
Fue entonces cuando un video de YouTube cambió su vida. La Universidad Nacional de San Martín anunciaba la apertura de la carrera de Ingeniería Espacial. Sin pensarlo dos veces, decidió cambiar de rumbo y emprender un nuevo viaje académico. Después de una “conversación difícil” con sus padres, quienes finalmente le dieron su apoyo, Matías se mudó a Buenos Aires para iniciar su carrera en la UNSAM.
El cambio no fue fácil. Matías tuvo que adaptarse a un ritmo de vida acelerado, equilibrar sus estudios con un trabajo de medio tiempo y aprender a convivir con personas de diversas culturas en una pensión. A pesar de los desafíos, su determinación y el apoyo de sus profesores y compañeros le permitieron seguir adelante.
Un futuro prometedor
Hoy, Matías trabaja en la Gerencia de Proyectos Espacial de INVAP, una empresa argentina dedicada al diseño, integración y construcción de plantas, equipamientos y dispositivos en áreas de alta complejidad, incluyendo la tecnología espacial. Su sueño es ayudar a Argentina a seguir construyendo satélites, aportando así a la alta tecnología que el país tiene la capacidad de desarrollar.
Opinión editorial
El viaje de Matías Escobar es una verdadera inspiración. Demuestra que con determinación, dedicación y el apoyo adecuado, se pueden superar los obstáculos y alcanzar sueños aparentemente inalcanzables. Su historia es un recordatorio del valor de la educación pública y de cómo puede abrir puertas a oportunidades que parecen lejanas. Además, nos insta a seguir invertiendo en ciencia y tecnología, sectores fundamentales para el futuro de nuestro país.