Inflación post-balotaje: Economistas anticipan escalada hacia incertidumbre
La inflación de octubre registró un 8,3%, un descenso en comparación con los meses anteriores. Sin embargo, se espera que los números aumenten en noviembre y diciembre. La preocupación crece ante las posibles repercusiones del resultado electoral. ¿Cómo afectará esto a la economía en el futuro?
Tl;dr
- La inflación de octubre fue del 8,3%, un descenso respecto a septiembre.
- Se observaron incrementos en comunicaciones, vestimenta y equipamiento del hogar.
- El gobierno mantuvo congelados los precios de ciertos productos y tarifas.
- Se proyecta una aceleración de los precios para los próximos meses.
La inflación de octubre: una breve tregua
El Gobierno respira aliviado tras el dato del 8,3% de inflación de octubre, anunciado por el INDEC. Sin embargo, esta cifra, que representa una disminución de 4,4 puntos porcentuales respecto a septiembre, no es más que una breve tregua. En lo que va de año, el IPC acumula una subida del 120% y 142,7% interanual.
Los factores detrás de la desaceleración
La moderación de la inflación en octubre se debe, en gran medida, a que no se reflejaron los efectos de la devaluación post-PASO. Sin embargo, se registraron subidas en sectores como las comunicaciones, la vestimenta y el equipamiento del hogar, con valores mensuales de dos dígitos. El Gobierno, por su parte, contribuyó a frenar una mayor escalada manteniendo congelados los precios de ciertos productos y tarifas y decidiendo mantener el tipo de cambio oficial en $350 hasta el 15 de noviembre.
El futuro de la inflación: una incertidumbre creciente
Pese a la relativa calma de octubre, los próximos meses se presentan tumultuosos. Los precios volverán a acelerarse debido a la incertidumbre sobre los acuerdos de precios y el futuro del dólar tras el cambio de administración. De hecho, ya se proyectan tasas de inflación de más del 10% para noviembre y diciembre. El economista de LCG, Matías de Luca, anticipa que “si todo sigue como hasta ahora, la inflación de 2023 debería cerrar en 175%-180%“.
Opinión editorial
En este panorama de incertidumbre, es esencial que el próximo gobierno desarrolle una estrategia sólida para controlar la inflación. Los ciudadanos necesitan certidumbre y estabilidad, y eso solo se logra con políticas económicas coherentes y sostenibles. El desafío es grande, pero no imposible. La clave estará en equilibrar las necesidades inmediatas con una visión a largo plazo para el desarrollo económico del país.