Hombre en busca de su madre biológica: “Quiero agradecerle su valentía al dejarme nacer
Miguel Suárez recurrió a las redes sociales como última opción cuando su investigación llegó a un punto muerto. Comenzó su búsqueda con una publicación que decía: "Mamá, te estoy buscando". ¿Podrá encontrarla a través de este medio?
Tl;dr
La búsqueda de Miguel Suárez
El cordobés Miguel Suárez, de 35 años, ha emprendido una búsqueda de gran importancia personal: encontrar a su madre biológica. Esta necesidad surgió con mayor intensidad tras la formación de su propia familia y el fallecimiento de su padre adoptivo, quien le proporcionó los pocos datos que tenía sobre su origen.
Suárez, quien ha vivido toda su vida en General Deheza, comenzó su búsqueda antes de la pandemia de COVID-19. Tras entrevistarse con diversas personas que podrían tener información, decidió compartir su historia en las redes sociales en un intento de localizar a su madre.
Un mensaje resonante
En un video publicado en su cuenta de Instagram (@masuarezgd), Suárez lanza un mensaje a su madre: “Mamá, te estoy buscando“. Este mensaje ha resonado en los medios y en las redes sociales, generando un gran impacto en la sociedad y una ola de mensajes de apoyo.
Suárez nació el 4 de junio de 1988 en el Hospital Zonal de Oliva, en Córdoba. Aunque los registros de su nacimiento fueron perdidos en un incendio, cuenta con una pista crucial: el nombre de una partera que asistió en su nacimiento, Clara Norma Ortiz de Mana.
Un encuentro soñado
Suárez no busca a su madre biológica por razones de dolor o resentimiento, sino por gratitud y comprensión. Anhela poder compartir un café con ella, conocer su historia y agradecerle por la vida que le dio, aunque haya sido en otro hogar. Su madre adoptiva también apoya totalmente su búsqueda.
Opinión editorial
La historia de Suárez es una poderosa recordatorio de las conexiones inquebrantables que forman nuestras identidades. Su búsqueda, lejos de ser una búsqueda de confrontación, es un testimonio de gratitud y reconocimiento hacia la mujer que le dio la vida. Es un llamado a la empatía y la comprensión, una búsqueda de raíces que nos recuerda el valor de conocer nuestras historias y aceptar todas las partes que nos conforman.