Hijo de campeón mundial, discípulo de Maradona y rival de Messi en el Inter Miami
El siguiente enfrentamiento entre Las Garzas y Orlando City contará con la incorporación de un nuevo jugador argentino, además de los ya presentes en el equipo de la Pulga. ¿Cómo crees que influirá esto en el juego?
Tl;dr
- Inter Miami enfrentará a Orlando City, con Messi y Ramiro Enrique.
- El equipo de Martino empezó bien la liga estadounidense.
- Ramiro Enrique, hijo del “Negro” Enrique, juega en Orlando City.
- Enrique aprendió de Maradona y espera enfrentarse a Messi.
Un clásico con aires de revancha
Inter Miami tiene una cita con el destino este sábado 2 de marzo. Su rival, nada más y nada menos que Orlando City. La tensión está en el aire, ya que en este partido se verá el regreso de Lionel Messi, después de una lesión que le hizo perderse el último encuentro.
El inicio prometedor de Inter Miami
Bajo la dirección de Gerardo Martino, Inter Miami ha iniciado con pie firme su participación en la liga estadounidense. Con una victoria contra Real Salt Lake y un empate ante LA Galaxy, acumula ya cuatro puntos y mantiene su invicto en la conferencia este, una mejora notable comparado con la temporada pasada.
Orlando City y la promesa de un encuentro inédito
Por otro lado, Orlando City, con un empate 0-0 ante CF Montreal, cuenta en sus filas con Ramiro Enrique. Este delantero argentino, hijo del “Negro” Enrique, debutó en la temporada 2024 de la MLS. Enrique y Messi no pudieron enfrentarse la temporada pasada, pero este encuentro promete ser memorable.
Ramiro Enrique, formado inicialmente en Banfield, y con un paso destacado por la Copa de la Liga Profesional, llegó a Orlando City en 2023. Su formación no solo se debe a su padre, sino también a las enseñanzas de Diego Maradona, con quien compartió en Dubai, durante la etapa de Maradona en Al-Wasl.
Opinión editorial
Este encuentro promete ser más que un simple partido de fútbol. Representa la oportunidad de ver a dos generaciones de futbolistas argentinos en un enfrentamiento inédito. Por un lado, Messi, la estrella indiscutible del fútbol mundial, y por otro, Ramiro Enrique, un joven talento que lleva en sus venas la pasión y la enseñanza de dos grandes del fútbol argentino: su padre, el “Negro” Enrique, y Diego Maradona. Sin duda, un partido para el recuerdo.