Febrero: Plazos fijos tradicionales rinden más del 30% en dólares con tipo de cambio estable
A pesar de la tasa de interés negativa en pesos frente a la inflación, la depreciación del dólar estadounidense ha generado ganancias en moneda fuerte. ¿Cómo afectará esto a la economía a largo plazo?
Tl;dr
- El dólar oficial subió un 1,9% en febrero y los alternativos bajaron entre 12% y 16%.
- Los plazos fijos en pesos rindieron tasas positivas medidas en dólares.
- El “carry trade” de febrero fue del 31%, el más alto en 30 años.
- Los analistas advierten sobre los riesgos del “carry trade” debido a la volatilidad del mercado.
El escenario cambiario en Argentina
Febrero presentó un escenario atípico para la economía argentina. El dólar oficial subió un 1,9% y los alternativos, ya sea en su versión blue o financiera, cerraron con bajas de entre 12% y 16%. Esto generó una relativa calma cambiaria y un escenario favorable para los inversores que apostaron a los plazos fijos en pesos, registrando tasas positivas medidas en dólares. En la jerga financiera, esto se conoce como “carry trade”.
El “carry trade” en detalle
El “carry trade” es una estrategia que permite al inversor comprar más dólares al final del periodo de inversión que al inicio. En febrero, la tasa en pesos de los plazos fijos tradicionales fue de 9,1% y el “carry trade” alcanzó el 31%, el valor más alto en los últimos 30 años. Esta situación se dio a pesar del fuerte recorte de las tasas reales en pesos.
Los riesgos de la estrategia
Aunque el “carry trade” puede ser atractivo, también presenta riesgos. Cualquier subida del tipo de cambio o recorte en las tasas de interés puede evaporar los rendimientos. Además, como señalan los analistas de Portfolio Personal Inversiones (PPI), la apreciación del peso está más relacionada con los flujos de inversión que con los fundamentos de la economía.
Opinión editorial
El fenómeno del “carry trade” es un reflejo de la incertidumbre económica que vive Argentina. Aunque puede ser una opción atractiva para los inversores, también es un indicador de la volatilidad y la falta de estabilidad en el mercado financiero del país. Es fundamental que los inversores estén plenamente conscientes de los riesgos asociados a este tipo de estrategias y tomen decisiones informadas y prudentes.