Exesposa de futbolista argentino busca vender su medalla mundialista
La mujer insistió en que solo desea que se le asigne lo que le corresponde en el divorcio, sin reclamar los bienes gananciales que se encuentran en Alemania. ¿Podrá obtener lo que se merece?
Tl;dr
- Yésica Frías, exesposa de Exequiel Palacios, vende su medalla del mundial.
- Busca pagar una deuda de departamento en Tigre.
- Frías amenaza con revelar información sobre la selección argentina.
- Palacios y Frías se separaron en circunstancias escandalosas en 2021.
Medalla de campeón a la venta
En un giro sorprendente de los eventos, Yésica Frías, la exesposa del famoso futbolista Exequiel Palacios, ha decidido comercializar la medalla de campeón del mundo que este obtuvo en Qatar 2022. El objetivo de esta venta es liquidar una deuda pendiente de un departamento en Tigre.
Un divorcio sin firma
«Todo lo que pido es lo que me corresponde», aseguró Frías en Socios del Espectáculo. Reveló que Palacios se niega a terminar de pagar el inmueble, ya que tenía incertidumbre sobre a quién le quedaría finalmente. “El departamento no lo quiere terminar de pagar porque no sabía si le iba a quedar a él o no”, declaró.
Decisión límite y amenazas veladas
Ante esta situación, la exesposa de Palacios tomó una decisión drástica. “Voy a vender todas las camisetas y la medalla del campeón del mundo para pagar el departamento.» Pero no se detuvo allí, también dejó caer una amenaza velada. “A él le conviene que yo me calle. Hay cosas que sé de la Selección que no dije”, afirmó.
Un matrimonio corto y escandaloso
Exequiel Palacios, de 24 años, y Yesica Frías, de 30 años, se separaron en circunstancias escandalosas después de haberse casado casi en secreto en julio de 2021. Hace ya algunos meses, la empresaria decidió hacer público el final del matrimonio, y también una serie de graves acusaciones contra su ya exmarido.
Opinión editorial
Este caso nos recuerda la importancia de separar lo personal de lo profesional. Aunque la situación es desafortunada, es un recordatorio de que los grandes logros deportivos no siempre se traducen en una vida personal exitosa. Finalmente, la venta de una medalla ganada con esfuerzo es un acto desesperado que subraya la necesidad de una gestión financiera sensata.