El desgarrador relato de una mujer discapacitada: le roban el auto en el hospital y arruinan su vida
Una mujer discapacitada en Córdoba fue víctima de un robo de coche cuando estaba adquiriendo medicamentos para la diabetes. Asegura que, al vivir en una vivienda alquilada, no tienen capacidad para adquirir otro vehículo. ¿Cómo puede la comunidad ayudar en este caso?
Tl;dr
- Patricia, discapacitada, denuncia robo de su auto.
- El vehículo fue esencial para sus desplazamientos sanitarios.
- El auto fue adaptado para su comodidad y movilidad.
- Patricia y su marido viven con una pensión limitada.
Una denuncia desesperada
Patricia, una mujer en silla de ruedas, ha hecho un llamado desesperado tras el robo de su vehículo, esencial para su movilidad. Junto a su marido, quien sufre de problemas en las manos, han sido privados de su medio de transporte indispensable para su vida diaria.
Un robo que paraliza
El pasado lunes, la pareja dejó su Ford Taunus de 1982 estacionado cerca del Hospital de Córdoba mientras recogían medicamentos. A su regreso, el vehículo había desaparecido. A pesar de sus indagaciones con conocidos y vecinos, nadie había visto nada. «Nos quitaron nuestro medio de movilidad. Es imposible que podamos volver a comprar un auto», lamentó Patricia.
Un vehículo adaptado y sin seguro
El coche, que habían adquirido en 2015, no sólo era su medio de transporte, sino que había sido adaptado para la comodidad de Patricia. El asiento del acompañante fue modificado por su marido para permitirle una mayor movilidad y comodidad. Además, debido a la antigüedad del vehículo, no habían podido asegurarlo, incrementando aún más su vulnerabilidad.
Una vida limitada por la falta de recursos
Ambos viven con una pensión limitada, no ganan más de $150.000 y no tienen ahorros. Patricia indicó que actualmente pagan $80.000 para alquilar la casa en la que viven. «El auto son mis piernas. Sin el auto no puedo moverme», concluyó.
Opinión editorial
El caso de Patricia es un claro ejemplo de cómo el robo de un objeto material puede tener un impacto devastador en la vida de una persona. Es un llamado a la sociedad y a las autoridades para que se tomen medidas en la protección de los más vulnerables, y para que se facilite la adquisición y adaptación de vehículos para personas con discapacidades. Cada individuo merece la oportunidad de vivir una vida plena y autónoma, sin importar sus circunstancias.