El abogado de Máximo Thomsen advierte: ‘Solo saldrá de la cárcel en un féretro’
"Francisco Oneto, el abogado del rugbier, solicitó en su escrito la revocación de su condena y un nuevo juicio, enfatizando que su cliente no volverá a pisar la calle en su vida", ¿Podrá lograr un nuevo juicio?
Tl;dr
- Máximo Thomsen busca revocar su condena a cadena perpetua.
- Su abogado solicitó calificar el delito como “homicidio en agresión”.
- Thomsen apuntó contra uno de sus amigos detenidos.
- La defensa argumenta una violación al derecho de defensa.
Thomsen busca una nueva oportunidad en la justicia
Máximo Thomsen, uno de los jóvenes sentenciado a cadena perpetua por el homicidio de Fernando Báez Sosa, ha presentado un recurso de nulidad buscando revocar la sentencia y tener la oportunidad de enfrentar un nuevo juicio.
Una cuestión de calificación jurídica
Francisco Oneto, abogado de Thomsen, ha solicitado también que se reconsidere la calificación del delito, sugiriendo que debería tratarse de un “homicidio en agresión”, lo que conllevaría una pena máxima de seis años de prisión. “Por operatividad de los arts. 14 y 80 inc. 6 del Código Penal, los condenados por homicidios agravados no tienen derecho a libertad condicional”, argumentó.
Oneto expresó una preocupación seria al decir que “Máximo Pablo Thomsen, hoy de 24 años de edad, no volverá a poner un pie fuera de la cárcel durante el resto de su vida”.
Thomsen apunta a sus compañeros de causa
En un giro sorprendente, Thomsen señaló a uno de sus amigos detenidos, Enzo Comelli, como el autor del golpe inicial que derribó a Fernando Báez Sosa. Según Oneto, Thomsen fue privado de afirmar que no protagonizó la pelea y que el que empezó el disturbio fue otro de los amigos, Blas Cinalli.
El derecho de defensa cuestionado
La defensa de Thomsen argumenta que hubo una violación a su derecho de defensa, ya que no pudo requerir una pericia para determinar si un golpe concreto produjo la muerte, ni se le permitió interrogar a testigos clave.
Opinión editorial
Este desarrollo en el caso Thomsen nos recuerda la complejidad y la importancia de una defensa justa. Independientemente de la gravedad del delito, todos los acusados tienen derecho a una defensa completa y justa. Sin embargo, el desafío continúa siendo cómo equilibrar este derecho con la necesidad de justicia para las víctimas.