Doble femicida engañó a la policía durante 9 años con un cuerpo oculto en su casa
Con solo 18 años, Sibora Gagani comenzó a salir con Marco Romeo, un hombre de 31 años. Juntos emigraron a España, pero su relación tumultuosa terminó en ruptura. Sibora desapareció en 2014 y no fue hasta junio del año pasado, cuando Romeo fue arrestado por el asesinato de otra mujer, que se supo de ella. ¿Qué sucedió con Sibora?
Tl;dr
- Sibora Gagani desapareció en 2014 en Torremolinos.
- Su exnovio, Marco Romeo, confesó haberla matado en 2023.
- El cuerpo de Sibora se encontró emparedado en su antiguo apartamento.
- Romeo también es acusado del asesinato de otra mujer, Paula Martín.
El misterio de la desaparición de Sibora Gagani
En 2014, una joven de 22 años llamada Sibora Gagani desapareció en la localidad malagueña de Torremolinos. Había llegado tres años antes desde Italia, con su novio Marco Gaio Romeo, y trabajaba como camarera. “De un día para el otro, los llamados a su madre en Italia dejaron de hacerse”, lo que generó alarma.
Confesión de un asesinato escalofriante
La preocupación se transformó en horror cuando nueve años después, Romeo, detenido por el asesinato de otra mujer, confesó haber matado a Sibora. “Quiero colaborar, esto me va a perseguir toda la vida”, reveló a la policía. Según su relato, no solo la mató, sino que también escondió su cuerpo en una caja de madera detrás de una pared de su apartamento.
Un segundo crimen y dudas sin resolver
Romeo también fue acusado del asesinato de Paula Martín, una mujer de 28 años. Los vecinos de la pareja habían reportado discusiones violentas y constantes. Tras su detención, Romeo se retractó de su confesión sobre el asesinato de Sibora, alegando su inocencia y atribuyendo el crimen a la “mafia albanesa”.
Un juicio pendiente y la búsqueda de justicia
Actualmente, Romeo espera juicio por doble homicidio en una cárcel de Torremolinos. Si es condenado, se enfrenta a un máximo de 25 años de prisión. Elisabetta, la madre de Sibora, está convencida de la culpabilidad de Romeo y exige saber quiénes fueron sus cómplices. “Marco es un monstruo”, expresó a los medios españoles.
Opinión editorial
Este caso destaca la importancia de no ignorar las señales de violencia en las relaciones. La desaparición de Sibora y el asesinato de Paula son claros ejemplos de la violencia de género que aún pervive en nuestras sociedades. Es esencial que continuemos luchando por la justicia para todas las víctimas de estos crímenes atroces.