DNU: El Estado destina $6000 millones a Aerolíneas, surgen dudas sobre la financiación del déficit por los empleados
El Presupuesto 2022 incluye el dinero. El DNU de Milei permite que los trabajadores reciban las acciones de la empresa, pero ya señalan que no habrá recursos para las rutas menos productivas. Esto podría conducir a la venta de la compañía. ¿Podría esto afectar la estabilidad de los trabajadores?
Tl;dr
- Milei puede ceder acciones de Aerolíneas Argentinas a empleados.
- El gobierno pierde control estratégico y veto sobre la empresa.
- Incertidumbre sobre cómo los empleados financiarán el déficit.
- Posible privatización de la aerolínea en el futuro.
La cesión de Aerolíneas Argentinas: un giro inesperado
El megadecreto de Javier Milei ha sacudido la esfera pública con una propuesta revolucionaria: las acciones de Aerolíneas Argentinas podrían ser cedidas total o parcialmente a sus empleados. Este movimiento es el primer paso de un plan más amplio que busca sanear la empresa para luego privatizarla, ya sea entregándola a sus trabajadores o mediante una venta.
Consecuencias del cambio de propiedad
Con la derogación del artículo que impedía la cesión de la mayoría de las acciones, el Estado pierde su capacidad de decisión estratégica sobre la empresa y el derecho a veto en sus decisiones. Esta posibilidad ya había sido mencionada por el Presidente durante su campaña.
Sin embargo, el decreto no aclara cómo los empleados podrán enfrentar el “déficit de la empresa”. Aunque Aerolíneas Argentinas no utilizó dinero del presupuesto 2023, sí recibió $6.000 millones del presupuesto 2022. ¿Tienen los empleados la capacidad para afrontar los costos de operatividad de la compañía el próximo año sin recibir partidas estatales?
La realidad de Aerolíneas Argentinas
Actualmente, la aerolínea estatal tiene 11.947 empleados, 81 aviones y realiza unas 303 operaciones por día. Muchas de estas rutas no son rentables y cada despegue cuesta alrededor de 20 mil dólares. En total, se deben cubrir 6 millones de dólares diarios solo en operatividad.
Opinión editorial
Este cambio radical plantea interrogantes sobre el futuro de Aerolíneas Argentinas. La capacidad de los empleados para asumir la gestión y el financiamiento de la empresa es incierta, y la posible privatización podría tener un impacto significativo en la conectividad aérea del país. Sin embargo, la medida también puede ser vista como una oportunidad para fomentar el empoderamiento y la responsabilidad de los trabajadores. Solo el tiempo dirá si este audaz experimento será exitoso o no.