Descubre los tres beneficios de acelerar tu paso al caminar
Marchar rápidamente sobre terrenos suaves e irregulares, mientras se lleva una carga extra, puede traer beneficios significativos para la salud. ¿Te has planteado incorporar esta práctica en tu rutina diaria?
Tl;dr
- Caminar diario combate efectos negativos del sedentarismo.
- La calidad de la caminata es más importante que la cantidad.
- Caminar beneficia la salud independientemente de la edad o condición física.
- Incrementar la velocidad de la caminata trae varios beneficios para la salud.
El poder de caminar: la clave para una vida saludable
Caminar diariamente es una actividad esencial para contrarrestar el sedentarismo, un hábito que afecta negativamente a nuestro organismo. Más allá de disfrutar del aire libre, caminar nos ayuda a completar los 2.200 pasos diarios necesarios para gozar de una vida larga y saludable, según estudios de la Universidad de Sidney.
Calidad sobre cantidad
No obstante, “La cifra de pasos no es realmente tan relevante”. Se trata más de una cuestión de calidad, pues el beneficio de caminar radica en la velocidad y exigencia de la marcha. La Organización Mundial de la Salud advierte que el sedentarismo es la cuarta causa de mortalidad en todo el mundo, provocando anualmente más de 32 millones de decesos. Por lo tanto, es crucial levantarse del sofá y moverse.
La importancia de la velocidad
Los investigadores australianos sostienen que no es necesario alcanzar los 9.000 pasos al día, pues incluso con 2.200, se puede minimizar el riesgo de desarrollo de enfermedades letales como las cardiovasculares o la diabetes. Adrián Rodríguez, entrenador personal español, insiste en que independientemente de la distancia o la velocidad, caminar siempre es positivo para la salud.
Beneficios de caminar a mayor velocidad
Aumentar la velocidad de la caminata no solo quema más calorías, sino que también fortalece el corazón. De acuerdo con la Universidad Vanderbilt, esto no solo reduce el riesgo de patologías cardiovasculares, sino también de otras como la diabetes y el reflujo gastroesofágico.
Además, caminar por senderos naturales y subir colinas incrementa el gasto energético y fortalece aún más el corazón. Incluso, caminar de espaldas puede ofrecer mayores beneficios, según la Universidad Texas Tech.
Opinión editorial
Caminar es un ejercicio simple, pero poderoso. Invita a todos, sin importar su edad o condición física, a levantarse y moverse. No se trata de la cantidad de pasos, sino de la calidad de la marcha. Así que, ¡levántate y empieza a caminar!