Del trabajo sexual al fútbol profesional: ‘Ahora sí, soy feliz’
Desde niña, Tiziana Lezcano no pudo jugar debido a un accidente que sufrió su padre y tuvo que salir a trabajar para ayudar en su hogar. Se sentía como un objeto, forzada a relacionarse con hombres que no deseaba, confesó a TN. ¿Cómo logró superar esta difícil etapa de su vida?
Tl;dr
- Tiziana Lezcano, futbolista transgénero, creció en un ambiente vulnerable pero amoroso.
- Ante la adversidad y el rechazo familiar, Tiziana decidió dedicarse al trabajo sexual.
- Después de una fase de autodescubrimiento y aceptación, Tiziana volvió al fútbol.
- Actualmente, Tiziana es una futbolista profesional, superando prejuicios y barreras.
Una niñez marcada por la adversidad
Tiziana Lezcano, una futbolista transgénero, creció en Rafael Castillo, en el partido bonaerense de La Matanza. A pesar de un entorno de vulnerabilidad, el amor siempre estuvo presente en su vida. Desde pequeña, mostró intereses y comportamientos atípicos para una niña, un hecho que le generó conflictos con su familia y su entorno.
Un viaje de autodescubrimiento y aceptación
En su adolescencia, Tiziana luchó contra el miedo y la confusión sobre su identidad de género y su orientación sexual. “Siempre supe lo que me gustaba. Siempre supe lo que quise ser”, confiesa. Sin embargo, su madre no aceptó su identidad y Tiziana tuvo que “salir del closet dos veces”, la primera vez al declararse gay y la segunda, al iniciar su transición.
De la adversidad al triunfo
Tras un período trabajando en el comercio sexual y tras la muerte de su madre, Tiziana decidió reorientar su vida y regresar al fútbol. Tras superar una prueba en el Club Ferro Carril Oeste, firmó un contrato semiprofesional y ahora disfruta de su carrera deportiva. “Podría tener mucha más plata, pero si no haces lo que verdaderamente te gusta te sientes vacía”, afirma.
Opinión editorial
Tiziana Lezcano es un ejemplo de resiliencia y determinación. Su historia es un recordatorio de que, a pesar de los obstáculos y adversidades, es posible alcanzar nuestros sueños. Aunque su camino no ha sido fácil, Tiziana ha demostrado una fortaleza increíble para superar prejuicios y barreras. Su historia es una inspiración para todos los que luchan por su identidad y por su pasión. Es un testimonio de que no importa de dónde venimos, sino a dónde vamos.