Cómo la vida en Argentina transformó a una rusa: 4 cambios claves
La influencer se mudó a nuestro país hace casi un año y compartió las adaptaciones que ha tenido que hacer. ¿Qué crees que fue lo más desafiante para ella?
Tl;dr
- Valeria, una rusa en Argentina, comparte su adaptación en TikTok.
- Adoptó el hábito de tomar mates a cualquier hora.
- Se acostumbró a cenar más tarde que en Rusia.
- Se volvió fanática de la milanesa con papas fritas.
De Rusia a Argentina: el viaje de Valeria
La migración siempre ha sido considerada como una oportunidad para explorar nuevas culturas y experiencias. Este es el caso de Valeria, una joven rusa que decidió establecerse en Argentina, buscando abrirse camino a nuevas oportunidades. Su historia, compartida a través de su cuenta de TikTok @valeenargentina, nos ofrece un vistazo a su camino de adaptación a nuestra cultura e idioma.
Adaptándose a los hábitos argentinos
En uno de sus videos más populares, Valeria responde a la pregunta “¿Cómo te diste cuenta de que te convertiste en una argentina?”. Entre las respuestas que destaca, se encuentra la costumbre de tomar mates. Esta bebida, icónica de nuestra cultura, se ha convertido en una presencia constante en su día a día, sin importar la hora.
Cambios en la rutina y la gastronomía
Además de adoptar el hábito del mate, Valeria ha experimentado cambios en su rutina diaria. Un ejemplo de esto son los horarios de cena. Mientras que en Rusia estaba acostumbrada a cenar a las ocho de la noche o incluso más temprano, en Argentina ha adaptado su horario a uno más tardío. Asimismo, Valeria ha desarrollado un gusto por la milanesa con papas fritas, un plato típico de nuestra gastronomía.
El impacto de su historia
El testimonio de Valeria ha resonado en la comunidad de TikTok, generando miles de reproducciones y ‘me gusta’. Los comentarios reflejan el apoyo y la acogida de los argentinos hacia Valeria, destacando frases como “Ya está, te argentinizaste, bienvenida” y “A las ocho todavía estoy tomando mate”.
Opinión editorial
Las historias de migración, como la de Valeria, son un recordatorio de la riqueza cultural que aporta la diversidad. Su adaptación a nuestra cultura y costumbres no solo demuestra su resiliencia, sino también la capacidad de la sociedad argentina para acoger a aquellos que buscan nuevas oportunidades. Así, Valeria se convierte en un símbolo de la unión entre culturas y la importancia de la inclusión y la apertura en nuestra sociedad.