Acuerdo histórico por la paz en Gaza: claves de una jornada crucial
ADN
Una jornada clave marca un avance sin precedentes hacia la paz en Gaza, con un acuerdo histórico que reconfigura el escenario del conflicto. Las negociaciones intensivas abren nuevas perspectivas para la región tras meses de tensión y violencia.
Tl;dr
- Histórico acuerdo de paz firmado en Charm el-Cheikh.
- Ausencia de Israel y Hamas, dudas sobre aplicación.
- Liberación de rehenes e intercambio sin precedentes.
Acuerdo de Paz en Gaza: un giro inesperado
La ciudad egipcia de Charm el-Cheikh fue escenario, el pasado 13 de octubre de 2025, de lo que muchos ya describen como una «jornada histórica». Bajo la atenta mirada del presidente Abdel Fattah al-Sissi, se escenificó la firma de un nuevo acuerdo sobre la disputada franja de Gaza. Aunque el ambiente general rezumaba optimismo, la realidad introducía matices: ni representantes de Israel ni de Hamas participaron en el acto.
Líderes presentes, protagonistas ausentes
A pesar del simbolismo y las grandes expectativas generadas, la mesa estuvo dominada por una treintena de dirigentes árabes y europeos. Figuras como Emmanuel Macron, el presidente palestino Mahmoud Abbas, y mandatarios de España, Italia, Alemania y Reino Unido compartieron protagonismo con el secretario general de la ONU, Antonio Guterres. La ausencia tanto de Israel como del grupo islamista deja interrogantes abiertos sobre la viabilidad del pacto.
Varios elementos explican esta incertidumbre:
- Aceptación teórica pero no asegurada del desarme de Hamas.
- Dudas respecto a la futura estructura política en Gaza.
- Pendiente aún la convocatoria internacional para reconstruir el territorio palestino.
Anuncios ambiciosos y detalles pendientes
La declaración conjunta lleva las firmas destacadas de Estados Unidos, Egipto, Qatar y Turquía. El expresidente estadounidense Donald Trump, copresidente del evento, no escatimó en palabras grandilocuentes: proclamó el inicio «de una nueva era para Oriente Medio». Sin embargo, el texto apenas perfila medidas concretas más allá del compromiso para un cese al fuego duradero y la creación aún indefinida de un Consejo de la Paz para Gaza.
En paralelo a los gestos diplomáticos —como el apretón de manos entre Abbas y Trump ante una banderola «PEACE 2025»— los detalles clave siguen bajo negociación. El propio Macron reconoció desde París que «quedan muchas etapas por escribir», sugiriendo que el papel real que se reserve a la Autoridad Palestina será determinante.
Cautela internacional ante un proceso frágil
El reciente intercambio masivo —veinte rehenes liberados frente a dos mil prisioneros palestinos— ha sido descrito como inédito incluso por los negociadores más veteranos. Pero nadie da por sellado aún este capítulo: los próximos meses pondrán a prueba si este impulso diplomático deriva realmente en estabilidad para una región marcada por décadas de conflicto.