Zulemita Menem defiende el honor de su padre en homenaje emotivo en la Casa Rosada
Durante el evento, junto a Milei, la hija del exmandatario no pudo contener las lágrimas al evocar a Carlos Saúl Menem. ¿Cómo influyó este recuerdo en el desarrollo del acto?
Tl;dr
- Zulemita Menem inaugura busto en honor a su padre.
- Criticó a los detractores de Carlos Saúl Menem.
- Agradeció a Javier Milei por la iniciativa.
- Milei elogia la trayectoria política de Menem.
Un homenaje a Carlos Saúl Menem
Zulemita Menem, con la voz entrecortada y al borde del llanto, inauguró un busto en homenaje a su padre, el expresidente Carlos Saúl Menem. Durante su emotivo discurso, Zulemita defendió el legado de su padre y criticó a aquellos que lo atacaron durante su vida política.
Defensa del legado Menemista
«Como hija de Carlos Saúl Menem, me siento muy honrada de estar aquí después de haberlo acompañado en su ejercicio de la presidencia desde su infancia hasta su último latido», afirmó. Zulemita cuestionó a quienes criticaron a su padre tras su presidencia, señalando que «su nombre fue sometido por muchos a expresiones descabelladas e injuriosas a las que nunca contestó».
Enfatizó en el impacto positivo que tuvo el gobierno de su padre en Argentina, indicando: «Sin embargo, aquellos que pusieron sus mayores esfuerzos en humillarlo no pueden negar la transformación que vivió nuestro país, la modernización e inclusión en el mundo durante su gobierno, que hasta el momento no se han repetido».
El homenaje de Javier Milei
Por otro lado, Javier Milei, presente en el acto, destacó la trayectoria política de Menem, señalando: «Hoy estamos haciendo un acto de justicia. Estamos reconociendo su liderazgo, su trayectoria política y sus gobiernos». Añadió que Menem fue para él «el mejor presidente de los últimos 40 años, por lo menos».
El busto de Menem se exhibe desde ahora en el Salón de los Bustos de la Casa Rosada, junto a los de otros mandatarios nacionales, y es un homenaje a los presidentes constitucionales argentinos.
Opinión editorial
Este acto es un recordatorio de que, independientemente de las críticas y controversias, el legado de un líder político puede perdurar y ser valorado con el paso del tiempo. La historia argentina es rica y diversa, y la figura de Menem, con sus luces y sombras, forma parte de ella. En este sentido, la inauguración del busto es un reconocimiento a una etapa de la historia argentina que debe ser recordada, analizada y comprendida, no solo por su impacto en su momento, sino por las lecciones que puede ofrecer para el futuro.