Vídeo: Impactante rescate de un niño de 5 años caído en un pozo en jardín de infantes
En la ciudad bonaerense de Claypole, un niño fue salvado por bomberos, afortunadamente sin sufrir lesiones. ¿Te imaginas la angustia que debió sentir su familia durante este incidente?
Tl;dr
- Un niño de cinco años cayó en un pozo séptico en un jardín de infantes.
- Las autoridades del jardín desconocían la existencia del pozo.
- Los bomberos rescataron al niño, quien no resultó herido.
- El niño, que tiene autismo, está tomando medicamentos por precaución.
Una caída inesperada
En un dramático incidente, un niño de cinco años se convirtió en el protagonista de una historia que pudo haber terminado en tragedia. El pequeño Francesco fue el desafortunado protagonista de este incidente que tuvo lugar en un jardín de infantes ubicado en Claypole, en el partido de Almirante Brown. El susto se produjo cuando el pequeño cayó en un pozo séptico de cinco metros de profundidad.
Los hechos
Las autoridades del centro educativo desconocían la existencia del pozo, aunque habían observado una pequeña grieta en el suelo. Sin embargo, cuando Francesco pasó por allí, el suelo se desplomó bajo sus pies. «No pude acercarme porque el pozo se podía desmoronar con él adentro. Estaba sostenido por una cuerda y teníamos miedo de que se le cayera toda la tierra encima”, relató Gabriela, su madre.
El rescate
Inmediatamente las maestras le lanzaron una cuerda a Francesco para que se agarrase y esperase la llegada de los bomberos. Gracias a su rápida intervención, los bomberos lograron rescatarlo ileso. Tras su rescate, fue trasladado al hospital para realizarle chequeos y una tomografía, que descartaron cualquier lesión ósea.
A pesar de que el niño no sufrió lesiones físicas, Gabriela indicó que su hijo, que padece autismo, estaba asustado y tuvo problemas para dormir. «Tiene que tomar medicamentos porque el pozo en el que cayó puede estar lleno de virus», agregó su mamá.
Opinión editorial
Este incidente destaca la importancia de garantizar la seguridad en los centros educativos, especialmente en los espacios de recreo. Es crucial que se realicen inspecciones regulares para identificar y rectificar cualquier peligro potencial, y así evitar tragedias. Por último, se debe aplaudir la rápida reacción de las maestras y los bomberos, cuya intervención evitó que este incidente tuviera un desenlace mucho más grave.