Ruralistas alzan la voz sobre el alarmante estado de las rutas de transporte de productos
La Asociación de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte (Apronor) ha divulgado vídeos evidenciando el estado de abandono total en que se encuentran los caminos provinciales, situación que persiste desde hace al menos ocho o diez años. ¿Cómo puede resolverse esta problemática?
Tl;dr
- Productores rurales de Tucumán exigen mejoras en las infraestructuras viales.
- El mal estado de las rutas afecta la logística y el desarrollo del sector agropecuario.
- Los problemas viales generan costos adicionales y demoras en la entrega de productos.
- La situación podría revertirse con la nueva gestión gubernamental.
El clamor rural de Tucumán
El sector rural de Tucumán ha emitido un fuerte llamado a la acción. La Asociación de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte (Apronor) ha alzado la voz, reclamando mejoras urgentes en las infraestructuras viales. Concretamente, las rutas provinciales 324, 329 y 334 han sido descritas como un «abandono total» que afecta negativamente a la logística y el desarrollo agropecuario de la región.
Las consecuencias de un mal estado vial
El mal estado de las carreteras no solo representa un desafío logístico, sino que también implica costos adicionales para los productores. Según Roberto Palomo, vicepresidente de Apronor, estos desafíos se traducen en demoras en la entrega de productos y en la necesidad de buscar rutas alternativas, lo cual puede generar costos adicionales.
Un llamado a la acción
“Somos el único país donde pasamos del asfalto al ripio y a la tierra”, afirmó Gonzalo Blasco, presidente de Apronor. Esta situación, que afecta a la competitividad de la producción local, ha suscitado inquietudes. La esperanza reside en que la situación pueda revertirse con la nueva gestión gubernamental a cargo de Osvaldo Jaldo.
Opinión editorial
Este llamado a la acción subraya la importancia de invertir en infraestructuras viales para garantizar la eficiencia y la competitividad de la producción rural. El compromiso gubernamental será esencial para revertir esta situación y asegurar un futuro próspero para el sector agropecuario de Tucumán.