El trigo alcanza su precio más alto en casi 10 meses en el mercado de Chicago
La jornada fue positiva para la soja y el maíz, con el cereal de invierno alcanzando cotizaciones de hasta US$13,50 por tonelada, las más altas desde el pasado 31 de julio. ¿Se mantendrá esta tendencia al alza?
Tl;dr
- El trigo alcanzó precios máximos en casi 10 meses en Chicago.
- La soja subió $3000 (1,1%) en el mercado argentino.
- La oferta de proveedores del Mar Negro está en riesgo debido a las heladas.
- Las exportaciones brasileñas de soja han disminuido debido a problemas meteorológicos.
Altas cotizaciones de trigo y soja
El mercado de granos inició la semana con un fuerte impulso. El trigo alcanzó su punto más alto en casi 10 meses en el mercado de Chicago. En Argentina, el valor de la tonelada de soja se disparó 1,1%, cerrando a $275,000 en el segmento disponible de Rosario, según informó Eugenio Irazuegui, responsable de Research de la corredora Zeni.
¿Qué está impulsando estos precios?
Un factor clave en esta dinámica es el temor a la reducción de la oferta de los principales proveedores del Mar Negro, principalmente Rusia y Ucrania. «Los episodios de heladas tardías se han extendido desde el suroeste de Rusia hasta el centro-este de Ucrania, aumentando la proporción de hectáreas afectadas», explicó Irazuegui.
La consultora ucraniana APK-Inform estima que la ola de frío ha impactado entre el 20% y el 30% de la superficie de cultivo. Las temperaturas han descendido a valores entre -2° y -9° en ciertas zonas, y se espera una disminución en los montos destinados a la exportación.
Impacto en Sudamérica
En paralelo, la soja en Brasil ha experimentado una subida importante debido a las previsiones meteorológicas para el sur del país. En Río Grande do Sul, la situación crítica parece prolongarse más de lo previsto. «De no haber mejorías en el corto plazo, se podría ver un aumento en la proporción de hectáreas desechadas», advirtió el analista de Zeni.
La actividad de cosecha y el movimiento de cargas en el puerto se han resentido desde principios de mes, lo que ha provocado una disminución en las exportaciones brasileñas de soja.
Opinión editorial
Estos acontecimientos subrayan la fragilidad de los mercados agrícolas frente a los desafíos climáticos. Es fundamental que los productores y las instituciones se adapten a estas nuevas realidades y desarrollen estrategias resilientes para garantizar la seguridad alimentaria global.